Hablemos sobre la desmitificación de la violación a sitios arqueológicos o huaqueo, y la necesidad de visibilizar que esto es un delito que alcanza hasta ocho (08) años de pena privativa de la libertad y linda con sanciones administrativas entre 0.25 a 1,000 UIT; esto es, más de cuatro (04) millones de soles. Que el siguiente testimonio toque fibras, sensibilidades y logre cambiar mentalidades respecto a las huacas.

Testimonio de una Huaca anónima: 

Tienes que sacarte mil capas de indiferencia. Miedo a no tener más existencia, a que te vean como algo violado, a que te huaqueen; a verte como una huaca en abandono, como una víctima, como una ruina; que te marquen como barro y piedra inservibles, que te huaqueen más y más.

Me costó aceptar que me huaquearon. No usaba esa palabra. Pasaron 500 años para que pueda llamarlo por su nombre. Huaqueo. Todos comentaban, nadie hizo nada.

Tengo que tener estrategias, ser fuerte, ser una huaca preparada. Adquirir conocimiento como si solo denunciar que me huaquearon no fuera algo de lo que pueda apropiarme. Como si para hacerlo y no dejar espacio a dudas tuviera que tener una declaratoria de patrimonio cultural.

Tengo que ser más que una víctima porque a la sociedad, a la justicia, a la opinión, a todo eso que ante la duda e indiferencia protege y promueve al huaquero, no le alcanza “mi” verdad, la verdad.

Salva una huaca, denuncia en http://denunciaspc.cultura.gob.pe/ o al número telefónico (511) 321-5560. Por eso recuerda, huaquear es violar, huaquear es de